Por salvar a su hija, Antonio se sienta frente a un criminal que justifica la persecución, las detenciones, los asesinatos que estaban ocurriendo en Argentina durante la espantosa dictadura de Videla. Antonio desesperado va a la embajada del país a intentar que dejen en libertad a Inés y le devuelvan el pasaporte. Esta, sin estar metida en política, es arrestada debido a que albergó en su casa alguna reunión clandestina de amigos montoneros (organización que apoyaba a Perón y que la dictadura se encargó de exterminar) . El capítulo incrementa la preocupación y la tensión por Inés conforme avanza, hasta que ambas sensaciones se imponen al final. Los padres , desde la impotencia que implica la distancia, sufren la angustia de que su hija mayor no pueda volver y le ocurra algo grave. “Dicen que mucha gente desaparece” escuchaban, desgraciadamente no eran rumores.
“La historia nos absolverá” se justificaba el embajador argentino cínicamente ante Antonio cuando este acude forzado por Ochotorena a pedir disculpas por cuestiones diplomáticas. Maravillosa escena. Gran momento el sentar a Antonio frente a semejante personaje miserable. La mirada de rabia disimulada y de vergüenza ajena que le lanza Antonio lo dice todo. Por Inés se traga el orgullo, pero se percibe la impotencia ante tanta necedad. Le pide perdón, pero sabemos, porque le vemos a través de un inmenso Imanol Arias, que es un perdón falso y muy amargo para él. Alcántara hace de tripas corazón ante el criminal. Sale de la embajada con la mirada perdida, con el semblante muy serio seguido por un soldado armado.
Mucha preocupación y mucha pena es lo que siente Antonio por un país hermano, maravilloso, que en esos momentos era perseguido y herido por la sinrazón cobarde y armada. No, la historia no les absolvió, sino que se avergonzó y les juzgó y aún hoy se sigue pidiendo más justicia. Videla fue condenado a cadena perpetua por crímenes contra la humanidad, la pesadilla duró hasta el 83 que se instauró la democracia. Precioso el “Tango de las madres locas” de Carlos Cano que le acompañó hasta el coche en una escena inolvidable:
En la serie también se hizo mención a los niños desaparecidos. Grandes y sonados son los dramas que sufrieron cuando de mayores se enteraron de que sus padres adoptivos permitieron su secuestro y les alejaron de sus verdaderas familias. Algunos no lo sabrán nunca. Esta es una de las causas que defienden las Abuelas de Mayo, muy conocidas y candidatas al premio Nobel de la Paz. Hay una película al respecto “Los pasos perdidos” protagonizada por Irene Visedo.
Mucha preocupación y mucha pena es lo que siente Antonio por un país hermano, maravilloso, que en esos momentos era perseguido y herido por la sinrazón cobarde y armada. No, la historia no les absolvió, sino que se avergonzó y les juzgó y aún hoy se sigue pidiendo más justicia. Videla fue condenado a cadena perpetua por crímenes contra la humanidad, la pesadilla duró hasta el 83 que se instauró la democracia. Precioso el “Tango de las madres locas” de Carlos Cano que le acompañó hasta el coche en una escena inolvidable:
En la serie también se hizo mención a los niños desaparecidos. Grandes y sonados son los dramas que sufrieron cuando de mayores se enteraron de que sus padres adoptivos permitieron su secuestro y les alejaron de sus verdaderas familias. Algunos no lo sabrán nunca. Esta es una de las causas que defienden las Abuelas de Mayo, muy conocidas y candidatas al premio Nobel de la Paz. Hay una película al respecto “Los pasos perdidos” protagonizada por Irene Visedo.
Lo que me gusta muchas veces de Cuéntame es que los personajes se den de bruces con la realidad aunque esta sea amarga, dolorosa e hipócrita. Los personajes pasan malos tragos que les hacen enfrentarse a sí mismos, a su orgullo y a su conciencia. El esfuerzo de Antonio mereció la pena, Inés regresa a España y la recibe la familia al completo emocionados y nerviosos. Para mi fue imposible evitar la congoja al ver a la abuela correr hacia la nieta y verles con alivio cerrar los ojos. Me emociona mucho tenerles a todos juntos. A Antonio le faltaba la “niña de sus ojos”, esa con la que los padres se derriten. Inés está preciosa, tengo una especial ilusión con su regreso.
Y para cambiar de tercio, fue muy divertida la pillada que Merche hace a su vástago menor. Quién aún siga pensando en Carlos como aquel pequeñajo de antaño, no tiene más que ver este capítulo para dejar de hacerlo. Disfruta del sexo con su novia y Merche les pilla “con el carrito del helao” . Muy divertido el bochorno que pasan los chavales y la Milano, genial Ana Duato . "Antes de llover chispea" (¡eso me lo decía mi abuela!, qué bueno). A ver qué les ocurre en Pamplona, este Felipe tiene un aire chulesco y magnético, muy a lo don Pablo…incluso se permite el lujo de llamarle Carlitos (acordémonos del Antoñito del alférez) y por lo pronto a Karina no le inspira nada de confianza y en estas cosas las chicas de Cuéntame no suelen fallar.
Y por último, la temperatura subió en el capítulo subiendo la lívido a más de uno. Entre ellos Paquita y Miguel, quién también tuvo una discusión acalorada con Françoise por encontrarle unas chinas de marihuana en el bolso. Tal vez se quede todo en tomarse un porro de vez en cuando o quizás no… este personaje, muy influenciable y caótico… podría ser un buen espejo de la parte alocada de la movida madrileña en la que los jóvenes no controlaron, no se informaron y se dejaron llevar demasiado. Desde luego Miguel no ganará para sustos.
Un bonito, emotivo e importante capítulo con mi Argentina de telón fondo y hecho con mucho respeto. Bien por Cuéntame.
¡¡¡A ver si empieza ya la siguiente temporada!!!
ResponderEliminarAvisar en la tele cuando vaya a empezar
SUERTE A TODOS