26 de febrero de 2015

ENTREVISTA A SANTI CRESPO, JOSETE EN CUÉNTAME CÓMO PASÓ

"Me hubiera gustado vivir la Movida"

LAURA SANCHEZ M
Para el blog es un placer charlar con Santiago Crespo. Era una deuda pendiente el poder hacer un homenaje a su  Josete y comprobar de primera mano  cómo detrás del personaje se esconde un madrileño con los pies muy en la tierra, sencillo, amable y un gran conversador.  Lleva catorce años en Cuéntame, le conocimos con tan solo siete y le hemos visto crecer junto a Ricardo Gómez, al que considera su gran amigo.  Lo dice en su perfil “amigo del mejor, compañero de maestros”. Para nosotros los telespectadores ha sido un honor verle convertirse en todo un joven caballero con un gran futuro por delante. Santi tiene ahora 21 años y muchos sueños, entre los que entra la interpretación, la música y terminar sus estudios. Tiene muy claro que  hay que disfrutar pero también que el esfuerzo es fundamental para lograr sus objetivos.  Con Josete no para de sorprenderse,  le gusta que esté  desinhibido y que ahora sea el rey de la Movida en el impredecible 1983…

BlogCuéntame ¿Qué le espera a Josete y a Rosa Chillón esta temporada?
Santi Crespo: Esta temporada se deja llevar aún más por la Movida Madrileña  y esto lo que va a hacer es aumentar su autoestima y su seguridad en sí mismo. Porque desde pequeño siempre ha sido desconfiado y  sólo tenía sus dos amigos, Luis y Carlos, y a su madre.  En los ochenta, como muchos españoles, se deja llevar y le gusta, es su rollo, por así decirlo. Respecto al grupo,  no puedo desvelar mucho pero habrá sorpresillas guardadas…


Josete tiene una gran vis cómica que conecta con la gente.  ¿Te encuentras a gusto con este punto divertido del personaje? 
Sí, mucho. Josete es un personaje muy tranquilo, mola mucho llevarlo. A veces no se entera de nada y luego en otras ocasiones, en un momento, demuestra que es el más avispado. Con las chicas está últimamente desatado, ya habéis visto, ni amigas, ni enemigas, va a por todo.

Sorprende, a veces parece que está en la Luna y luego tiene salida para todo, como cuando se lanzó con la Ramona.(Risas) Sí, a eso me refiero, son facetas ocultas que tiene que te descolocan y que mola interpretarlas. Yo soy personalmente más tímido que mi personaje y eso no se nota, ni se ve reflejado en pantalla. Él, aunque  es más empanado y siempre el más callado, se echa para adelante. Alguna secuencia se plantea así, desde la timidez,  y de pronto  hacemos que suelte esa  frase que descuelga a todo el mundo.

LOS OCHENTA CANTANDO
Cuando te dijeron que tenías  que lanzarte a cantar, ¿qué se te pasó por la cabeza?
La primera vez que me comunicaron lo de Rosa Chillón, ni me lo pensé. Yo ya estuve dando clases de canto y dicción durante unos cuatro meses así que cuando me lo dijeron dos meses después pensé, “pues nada, adelante”. Como ya llevaba  ese tiempo aprendiendo con mi profesora Coral, me sentía con mucha seguridad.  Luego también tranquilizaba saber que en la Movida cualquiera podía coger una guitarra, ser cantante o salir con un grupo. 


¿Te hubiera gustado vivir esos años ochenta? 

Por una parte sí  que me habría gustado vivir la Movida por esa parte de locura. Todo el mundo hacía lo que le apetecía, se iban de fiesta continuamente. Ahora también hay mucho jolgorio, pero es distinto. Me hubiera gustado sobre todo por las pintas. Ahora hay hipsters, raperos… pero  en aquel momento la gente abría los armarios de su casa y cogían lo que pillaban y se lanzaban a la calle.  Sobre todo a Nao (Marcelo) y a mí, nos visten de una manera loca que nos sorprende y nos preguntamos si de verdad era así.

Imagino que os lo pasáis increíble, Nao, Lluvia, Elena y tú. Se ve que os apetece rodar juntos.
Sí, nos encanta, somos un grupo de chavales que estamos muy unidos y lo pasamos muy bien. En general, grabar cualquier secuencia de estas es muy divertido a la par que instructivo.


DESDE LOS OCHO EN CUÉNTAME
Cambiando de tema, toca preguntarte por tu paso por Cuéntame, eras muy pequeño, ocho añitos,  ¿tú te acuerdas de cuando empezaste?
Sí que recuerdo cosillas, de hecho veo capítulos de vez en cuando de la primera y segunda temporada y pienso, madre mía, cuesta creer la espontaneidad de los tres chavales. Es enorme, es algo muy auténtico.

¿Y te acuerdas del casting?
Recuerdo que éramos muchos niños y que estaban en la prueba Tito Fernández, Elena Arnao y Miguel Ángel Bernardeau. Ellos iban eligiendo quién sí y quién no. Tengo como flashbacks. Recuerdo conocer a Ricardo y a Manu antes de que nos eligiesen a los tres. En la última prueba nos pusieron juntos y recuerdo que  nos  dejaron en  una mesa con tortilla y  refrescos, fue muy divertido.

¿Seguís conservando la amistad los tres?
Sí, mucha, después de catorce años seguimos unidos, nos seguimos viendo, son muy buenas amistades. 

GRANDES AMIGOS Y GRANDES MAESTROS
En tu perfil tienes puesta una frase que me encanta “amigo del mejor y compañero de maestros”, dice mucho de ti. Habéis crecido juntos Ricardo y tú, estáis muy unidos. 
Está muy pensado eso y lo puse porque es la verdad, es lo que siento. Amigo del mejor, porque es mi mejor amigo, es como mi hermano prácticamente, y compañero de maestros porque a lo largo de la serie he trabajado con auténticos grandes. Algunos no están aquí, otros sí y todos han sido como profesores para mí. 

Desde luego, a tu lado has tenido a gente maravillosa de la interpretación, ¿qué sensación te dejan estos grandes maestros? 
De todos tengo muy buen recuerdo, Pepe Sancho, Luís Cuenca… Me acuerdo mucho de Toni Leblanc, hemos grabado muchas secuencias con él.  También de Fernando Fernán Gómez y su genio que era genial. Tengo un recuerdo muy dulce, era todo muy divertido. Es tanta la historia la que tenemos detrás que, al recordar, te quedas sin palabras.


Ay Toni, cuantas escenas entrañables con él, ¿qué añoras de él?
Cada vez que le veíamos nos decía, “¡oh mis niños, mis niños!”. Era como nuestro abuelito. Siempre recuerdo que mientras grabábamos ponía su punto humorístico, improvisaba en las secuencias. Pienso que muchas en las que nos reíamos tanto, se lo inventaba él. Eran carcajadas y se nota cuando el niño se ríe forzado o es de verdad. Me gusta mucho verlo y recordarlo.

Sobre la gente excepcional que tienes a tu alrededor, ¿aprendes  mucho de Imanol Arias, María Galiana y Ana Duato?
Son actorazos y la verdad es que cuando les ves en pantalla dices, “¡qué bien están!”. Sin embargo, actuando con ellos, es cuando realmente te das cuenta de lo que son, yo los veo como ejemplos, aprendes una barbaridad. 

También tienes a tu madre en la ficción Silvia Espigado, Clara, que también es una actriz maravillosa, ¿cómo te llevas con ella?
Es muy buena actriz Silvia, la quiero mucho y ella lo sabe.

Se nota,  tenéis mucha química
Sí, mucha.  Nuestra primera secuencia fue en el primer capítulo  en el que Carlos huía  y se escondía en el camión. Ella me tenía que tirar de la oreja para sacarme dónde estaba y me tiraba tan de verdad que hubo un momento que tenía la oreja un poco hinchada y le puse cara de rencor, todo enfadado, ¡pero nada! (risas). Luego me decía “¡ay lo siento cariño!” con una gran dulzura. (Escena). La adoro, no puedo decir otra cosa.

DESI, ROBERTO CAIRO
Este año nos ha dejado el grandísimo Roberto Cairo, nuestro querido Desi. Ha sido un duro golpe para todo el equipo y los telespectadores lo han lamentado muchísimo. Me gustaría que me contaras, siendo tú su hijo ficticio,  cómo lleváis su ausencia y qué recuerdos tienes de él.

Siempre cuando se va un compañero es difícil, sobre todo por él, era el alma del rodaje. Siempre que estábamos en el set recuerdo risas y buenos momentos. Me chocó bastante cuando me lo dijeron, cuesta aceptarlo.  La verdad que te quedas siempre con los buenos recuerdos y te pones a pensar en ellos y te vienen secuencias muy divertidas. Además, Roberto tenía un humor muy especial. Ricardo y yo lo hemos hablado y hemos coincidido en que nos hemos reído una barbaridad con él, a carcajada limpia. Esta temporada hay todo un capítulo homenaje para él que sin duda se merece.

De pequeño hubo una figura que os ha ayudado un montón que fue Alicia Hermida, reciente Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes. Ella interpretaba a Valentina en la serie. En otras entrevistas pregunté a Elena y Ricardo y los dos estaban derretidos con ella, coincidían en decir que fue vuestra gran maestra. 

Alicia es un amor, desde el principio a Manu, a Riki y a mí, y luego con la incorporación de Elena, siempre nos explicaba y nos cuidaba.  Recuerdo que  me decía, “¡Santi despierta!”,  porque era muy empanado y me despistaba (risas). Nos recordaba la dicción, nos quitaba las muletillas, ha sido nuestra profesora durante años y la queremos todos muchísimo. Ella se deja querer, es muy buena persona, muy buena actriz y muy buena maestra. 

Te interesaría en un futuro seguir interpretando?, ¿es vocacional desde pequeño?
Sí claro, me gustaría continuar. Me encanta la interpretación desde los siete años, aunque de pequeño quería ser hasta dentista. Ahora estoy estudiando otra cosa, Marketing, porque también me interesa mucho. Pero sí, sin duda, cuando acabe la carrera quiero seguir dedicándome a la profesión de actor por completo y como hobbie a la música. Quiero aprender a tocar un instrumento, a poder ser de viento, así que algún día me veréis por ahí. 

¿Qué consideras que es necesario para ser un buen actor o ser bueno en la profesión?
Es una mezcla de todo. Tiene que ser tanto preparación como un poco llevarlo dentro, en las entrañas. No sabría decirte porque aún considero que me falta mucho por aprender y me quiero preparar mucho. Yo creo que no te das cuenta y es cuando llegas a un nivel muy bueno,  tras mucho trabajo, cuando viene esa definición. Mientras no lo sabes, pero insisto, es vital la preparación. No sé si consigo explicarme bien.

Sí, te entiendo, cuando ves por ejemplo a Imanol o Echanove ocurre, ambos tienen un poso ya de sabiduría que les convierte en los grandes actores  que son.
Eso es, cuando le ves a ellos, a Ana o María, ves esa mezcla de talento, preparación, años de trabajar...  No es lo mismo tener la carrera de pintor que ser un pintor. Hay que practicarlo.

¿Qué actores  admiras?
Will Smith me encanta, tengo debilidad por él desde que lo veía en el príncipe de Bel Air.  Pero hay muchos actores desde españoles a extranjeros que me gustan,  tendría que hacerte una lista muy larga.

Veo entonces que la comedia te gusta, ¿te sientes cómodo en ella?
No solo me gusta, me encanta la comedia. Creo que es mi parte favorita de la interpretación. El drama también me fascina porque no es fácil y lo veo complicado creértelo. Para mí personalmente el humor, aunque tampoco sea sencillo, es más asequible. Eso sí, con los años hay que ir puliéndolo.


EL CARIÑO DE LA GENTE
¿Qué te ha sorprendido de estos años de Cuéntame?
A mí me asombra que la gente siga a pie de cañón, temporada tras temporada. Te das cuenta de lo que supone. Cuéntame es una serie familiar y todos los años te preguntas cómo irá. La gente año tras año demuestra que tiene un gran cariño a la serie. Por Twitter me mandan mensajes y me encanta cuando me dicen que lo ven  desde China, Chile... Hay personas que se van de España, siguen viéndonos y nos siguen transmitiendo el cariño y la felicidad. Es increíble.


Es abrumador notar ese cariño, desde el blog se percibe, debe de ser precioso sentirlo como vosotros.
La gente cuando te llama,  te para como si te conociese de toda la vida. Te pregunta qué tal va todo y es todo muy cordial y muy bonito.

Por último, ¿qué les dirías a los seguidores de Cuéntame?
Les agradezco que sigan ahí todos los jueves viendo la serie con tanta fidelidad y sobre todo su sinceridad porque eso nos ayuda mucho a mejorar cada temporada.

Muchísimas gracias Santi








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