No me gusta esperarme mucho de las cosas. No me gusta por el
chasco que suele traer la decepción, pero anoche iba con las expectativas muy
en alza y por más que intentaba relativizar el momento, no podía. Motivos
tengo, desde que Juan Echanove anunció que iba a volver a las tablas bajo la
dirección de Calixto Bieito me frotaba las manos pensando que el espectáculo,
la novedad e incluso la profundidad iban a estar asegurados. No me equivoqué y superó el instinto. Bieito
tiene una manera de entender el teatro que me fascina, es oscuro, vanguardista,
rompe esquemas, aunque yo diría mejor que los pone en un nuevo y sugerente orden. Me revuelve. Este director ha encontrado en
Juan la herramienta perfecta para poner
voz y vida a su visión inspiradora. Lo mismo ocurrió en la Plataforma de Houellebecq, un
auténtico y complejo salto al vacío de
nuevo con un personaje al
límite y peligrosamente infeliz.
Este director quería profundizar en los sentimientos más
ocultos y deleznables del ser humano, aquellos que todos tenemos dentro de nuestro
ser y que no dejamos escapar. Lo contrario
le ocurre al personaje que interpreta Juan, absolutamente roto por su maldad y desesperación.
Para representar esta tortura, qué mejor perspectiva que la de Edgar Allan Poe. Reconozco mi ignorancia con respecto a la obra
de este autor hasta que escuché la temática de “Desaparecer”. Me puse de
inmediato a leer y a ver qué se cocía en la mente del reconocido escritor. Mi sorpresa fue ver
que era un tipo difícil, con muchos fantasmas y un genio de la narración en sus cuentos y en poesía que terminó mal porque llevó la amargura
de sus textos a su propia vida. Es el autor del miedo por excelencia, el maestro del terror y toda una gran referencia
para autores como Julio Cortázar quien tradujo al castellano los textos que se han utilizado en la obra.
LA INOCENCIA DE MAIKA
De Maika Makovski conocía muy poco, es una de las más sólidas voces de la música independiente. Su
presencia en escena fue gélida , melodiosa y a la vez evocadora de una gran belleza.
Gracias a ella sentíamos el daño y el vacío que la locura del personaje de Juan había provocado. Es decir, ella es la inocencia de lo que la maldad se lleva por
delante, el alma que tanto defiende Bieito que existe y que se ve violentada por el odio.
Todo eso y más representa Maika con su elegancia, su mirada perdida y sus canciones a piano inspiradas en las
palabras de Poe. Con ella la obra se convierte en un concierto. Su preciosa voz, a veces se agudizaba de dolor arañando el Teatro de la Latina como si fuese el gato negro que tanto detesta Juan en la
obra y que le lleva al vértigo del precipicio, al rencor y terror más visceral y temible
jamás descrito.
Entre canción y canción de su compañera, Juan se asomaba a
ese abismo, apareciendo tenebroso y erguido entre las tinieblas mediante una
enorme nube de humo gris que envolvía todo el escenario y al público.
Daba miedo ver al actor moverse entre sombras, desencajado, perdido mientras explicaba, mediante los relatos de Poe ("El gato negro", "El cuervo", " Manuscrito hallado en una botella"), el
origen de la perversidad y de lo macabro que le
llevaron a olvidarse de los buenos valores acometiendo
para ello los actos más espantosos, como el saltar un ojo al dichoso felino (qué exclamación del público).
EL PESO DEL MIEDO
Juan impresiona por su intensidad, por
el preciso recital del que no olvida ni una sola coma; también por el dominio de su voz, tan lúgubre e
incluso tierna, que te ponía los pelos de punta; y por último, por llevar al
personaje a la desesperación más absoluta, desencajando el gesto totalmente,
retorciéndose, rindiéndose con resignación, rabia e ira según el momento.
Logra que entendamos el por qué alguien puede llegar a desear desaparecer y destruirse
cuando el tormento se hace insoportable a causa del miedo y del vacío o cuando no hay “nada más” por
lo que luchar, frase que repetía el insistente cuervo del poema.
Simplemente perfecto y soberbio. No estamos hablando de
solamente una gran interpretación. Con razón el actor ha comentado en diversas
entrevistas que lo da todo en el escenario, que vive y muere
interpretando. Lo consigue trabajando mucho y durmiendo poco porque no
subestima cada función, al contrario, a cada una les aplica el mismo mimo y
respeto. Lleva años demostrando que es un fiera en las tablas y que es un actor de largo
recorrido. Con esta función juega con unos ingredientes muy al límite y
en una obra poco convencional. Arriesga y domina con fuerza y
humildad, y eso me gusta mucho en un intérprete. Me encanta que haga obras
que, sin ser aleccionadoras, inviten a la reflexión y sobrecojan y en eso Bieito es un grande. Cuando acabó
la función, confieso que me costó explicar la gran impresión que me
llevé, necesité un rato; sin duda el escribir este texto me ha ayudado. Y
es que, aunque me avisaron de que me iba a encantar, superó mis expectativas con
creces.
No, definitivamente no entiendo el teatro sin Juan Echanove,
siempre será un placer y un descubrimiento. Por muchos años. ¡ Qué suerte tenemos señores, qué grandísima suerte es el poder disfrutar de su talento en Cuéntame!.
¡BRAVO MAESTRO!
Textos de Poe:
Enlaces de interés:
Punto de Encuentro Complutense
"Tras la niebla el miedo y el tormento: el talento de Echanove y Makovski"
"Tras la niebla el miedo y el tormento: el talento de Echanove y Makovski"
El Mundo "Si fuese el personaje que interpreto estaría encarcelado o muerto"
Hola guapa!!
ResponderEliminarMe quedo embobadita leyéndote siempre!! Tienes una capacidad de relatar y describirlo todo que hace que te entusiasme, sin haberlo visto o disfrutado, cualquier cosa de la que puedas estar hablando-escribiendo. No he tenido la suerte de ver la obra, ni creo que la tenga, pero sin haberlo hecho, haces que nos guste y que seamos conscientes de lo buena que es, de lo bien que está dirigida y lo GENIAL que está interpretada...
Juan Echanove es un magnífico actor... quienes le hemos visto desde sus comienzos, sabemos qué clase de artista es y cómo borda cada personaje; por lo que hemos comprobado por nosotros mismos, a parte de lo que tú nos estás contando, que su interpretación en esta obra, ponga realmente los pelos de punta al espectador por su calidad, es indudable. Lo sabemos sin haber sido testigos :)
Ojalá la pudiera disfrutar...aunque tú haces que quienes no tenemos la oportunidad, disfrutemos de ella sin haber asistido.
ENHORABUENA desde aquí a todos los que la hacen posible y desde luego a tí por ser tan encantadora y deleitarnos con tus posts, que son siempre preciosos.
Un beso guapa!!
Muchas gracias bonita! siempre tan amable, ojalá tengas la oportunidad de verle en teatro y comprobar en directo lo mucho que da en el escenario, es muy grande Juan. Inspirador.
ResponderEliminarUn besote