28 de febrero de 2016

CUÉNTAME 299. KARINA Y CARLOS, UNA SOLA RAZÓN ENTRE UN MILLÓN

Escena
Teniendo todas las razones del mundo, Carlos no pudo dar a Karina una para no irse a los brazos de otro. ¡Qué crueldad! Se quedó sin palabras, le entró miedo, inseguridad, timidez, de todo. ¡Ay! al instante se arrepintió y se imaginó besándola locamente. Nos puso la miel en los labios ya que por un momento les vimos juntos. Qué malos son los celos, qué mal rato dan, qué tontos nos ponemos,  pero también qué oportunos porque gracias a ellos se descubren muchas verdades. Estos dos se quieren,  se dicen que se importan, pero no acaban de entenderse y de dar el paso. Todo un ni contigo, ni sin ti, numerosas volteretas que bordan Ricardo y Elena.

Escena

Ya nos avisaban al principio para Carlos, Madrid es Karina, pero poco se podía imaginar él que al llegar iba a encontrar al enemigo en casa. La perfección de Isaías le trajo de cabeza y las peores noches de insomnio. Qué impotencia sentía Carlos cuando este cantaba (precioso) el “Al Alba” de Aute y “La mala reputación” de Paco Ibañez.  Durante todo el capítulo los amigos enamorados estuvieron  con un tira y afloja la mar de interesante lleno de miradas, orgullos e indirectas. “Llevo meses sin sexo”  le decía ella en la manifestación de la OTAN. 

El momento más sincero que tuvieron fue cuando se perdonaron la discusión del hospital y se dijeron a los ojos lo muy importantes que son el uno para el otro, pero sin ir más allá porque tienen dudas y miedo de estropear lo que tienen, en definitiva de hacerse daño. "¿Qué sitio tienes para mí? Cómo amiga..."   Una relación única la que nos lleva dibujando Cuéntame desde que eran niños, que es muy difícil que pierda fuelle y emoción. El beso imaginado causó más de un vuelco al corazón.



VOLAR
Mientras unos no consiguen arrancar a pesar de quererse, otros terminan historias que ya no tenían mucho sentido. Entre Paquita y Pepe no había amor, al menos esa sensación nos han dejado. El gallego intentó lanzar un órdago a la manchega pero esta no lo aceptó. En la cabeza de Paquita tener otro hijo está en las antípodas de sus objetivos. Ella lo deja claro “quiero volar y los hombres me ponen plomo en las alas”. Está en otra onda, quiere crecer, montar su “Bistró” en La Vaguada. Además ella tampoco quiere renunciar a su debilidad por Miguel. Los “alegres divorciados” se siguen tentando y aunque no acaben juntos, se entienden como nadie.

Menudo panorama se encuentra Pepe, Miguel en la cama con ella con ataque de apendicitis. Un choque con la realidad de que su relación era humo. Solo le quedó hacer las maletas y despedirse con clase y mucha resignación. Grande Pepe , Sergio Pazos. La vida sigue aunque Miguel crea todo tremendista, con colonoscopia de Olmedilla incluida, que se le acaba.


Escena: el negocio de Jareño
EL VINO Y LA SUPERPOP
Y tanto que sigue, Antonio y Merche continúan luchando por la bodega, haciendo cuentas y reuniendo al consejo de administración en el mismísimo hospital. La idea de Antonio de hacer 8000 botellas con la cara de Franco sienta a Carlos como un tiro y al resto de la familia le entran muchas dudas. No era buena idea significarse, por ello acaban, con buen criterio, elaborando botellas a favor de la OTAN, todas con las añadas más peleonas. “Nuestra vida es nuestro vino”, dice Antonio con convicción. Merche le achaca volar alto como buen Parriba que es, pero él asegura estar aterrizando. Para ello está conociendo a gente muy peculiar. El tal Jareño, primo de Ramón, resulta ser un todo un personaje carismático que seguirá dando que hablar. Por ahora es el único que le ha dicho que su vino no es de alta gama y le ha hecho pisar un poco tierra. 

La lucha por la bodega va a ir paso a paso, todavía les queda mucho y será duro, casi tanto como la adolescencia de María. Antonio lleva muy mal eso de que su niña se haga mayor y tenga pretendientes. “Más matemáticas y menos superpop”. Herminia también se sorprende con la edad del pavo de su nieta y con los contenidos de la revista que tantos suspiros se ha llevado. Mucha paciencia hay que tener con María que está contestona, con las hormonas a flor de piel y con la “sombra aquí y sobra allá”. Muy bien la peque, qué vértigo da verla crecer, preciosa Paula.



LA INTRIGA DEL CONDE Y A TU LADO
Por otro lado la hija mayor llena de preocupaciones a su madre. Merche sigue dudando con José Ignacio y nos han descubierto que desgraciadamente tiene razón. El conde miente a Inés y le oculta que le han aceptado para el papel de Berlanga en “La Vaquilla”. Destruye la oportunidad de su vida Cree que ser actriz es malo para ella y sobre todo para él. Hay que preguntarse por qué. Merche en la peluquería a través de la deslenguada hermana interpretada por Nieve de Medina averigua que estuvo casado con una arpía que le engañaba constantemente y qué, a pesar de eso, él estuvo a su lado incondicionalmente hasta el día de su muerte. Luchi también nos deja ver esta faceta controladora del padre y lo mal que lo pasó viendo en su casa desfilar a los amantes de su madre.  Es desconcertante, porque sigue teniendo detalles muy buenos y no parece mal tipo, pero ya ha hecho llorar a Inés y eso no es nada bueno.  

Pase lo que pase, Merche por ahora, deja claro a su hija que va a estar a su lado, no quiere tenerla sentada  enfrente como visualizó en el psicólogo. Es algo muy normal, que los padres sientan que los hijos les retan constantemente. Los miedos de Merche van más allá, no quiere que su hija fracase y se vuelva a equivocar. El motivo es sencillo, se adoran, siempre  han sido muy cómplices y se han apoyado y admirado. Hay que dejar a los hijos equivocarse y estar ahí pase lo que pase, lo que ocurre es que con Inés da ya mucha pena porque lleva un historial de errores considerable. Con lo buena que es... Fue  bonito ver el detalle con su madre, se la lleva a la peluquería para ponerla más guapa si cabe aunque el desastre de su padre no se dé cuenta y la vea “rara”.

Escena: Celos en la manifestación contra la OTAN
Es bonito lo que nos cuenta el capítulo de que hay que veces que daríamos un mundo por volver atrás para evitar meter la pata o cambiar nuestra manera de  tomar decisiones. Carlos hubiera dicho no una, mil razones a Karina para estar juntos.  Al Heredero no le queda otra que resignarse ante el destrozo ocasionado en su corazón y seguir adelante. Quién sabe si habrá nuevas oportunidades de arreglarlo, más volteretas o nuevos caminos. La verdad es que si no nos pasaran estas cosas,  la vida sería muy aburrida. Qué bien nos lo refleja y nos lo hace sentir nuestros Alcántara.



ESCENAS

1 comentario:

  1. Muy bonita forma de exponer la crónica del capítulo!!! Es una pena que no tengas más comentarios en el blog. Yo llevo siguiendo la serie desde el primer capítulo, he crecido con Carlos. Yo cuando empezó tenía 7 años y aún sigo viendo la serie, ahora soy un fan total, a los Alcántara se les quiere casi como si formaran parte de tu familia

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